Tener una ventana que no aísla provoca que, además de sufrir filtraciones de ruido, la constante entrada de frío y calor hará que se dispare el gasto energético de nuestra vivienda. Por lo tanto, apostar por buenos materiales e instalar ventanas de calidad que aíslen completamente la vivienda es la mejor opción.
Para detectar que unas ventanas no están funcionando todo lo bien que debieran debemos fijarnos en cuatro aspectos:
FILTRACIONES DE AIRE Y AGUA EN LA VIVIENDA
Cuando, incluso con las ventanas cerradas, las cortinas se mueven, o apreciamos la entrada de agua en la vivienda, no hay duda de que tenemos un problema de aislamiento que si no solucionamos puede ocasionar corrosión y putrefacción en las ventanas.
En las ventanas fabricadas con perfiles de PVC esto no sucede. Además de no sufrir filtraciones de agua o viento, el PVC para ventanas, es un material imperturbable ante la contaminación por hongos.
POCA RESISTENCIA AL VIENTO
Una ventana con poca resistencia al viento genera corrientes de aire internas y pérdida de calor o frío, dependiendo de la estación. Por lo tanto, esto supondrá un mayor gasto energético.
Al contrario que en otro tipo de materiales, en que las esquinas de las ventanas, se unen con tornillos, esto no sucede en las ventanas de PVC por una sencilla razón: las uniones se realizan con un sistema de esquinas soldadas y esto las hace muy resistentes, sin fisuras y totalmente impermeables a la entrada de viento.
CONDENSACIÓN
Una ventana tiene mal aislamiento térmico cuando la superficie del interior de la ventana alcanza temperaturas muy bajas en invierno respecto a la temperatura interior de la vivienda. Esto se traduce en vapor de agua que se deposita en la ventana.
El PVC es un aislante natural que además cuenta con un sistema de juntas totalmente eficaz así como cámaras que dividen el espacio interior de los perfiles. Esto hace que ni el frío ni el calor del exterior entren en contacto con el interior, manteniendo el confort en la vivienda.
RUIDO
Para mantener el confort en nuestro hogar es fundamental que nuestras ventanas sean capaces de aislarnos del ruido exterior.
Si escuchamos ruido, especialmente por las noches, no hay duda, nuestras ventanas no aíslan. En esto tiene que ver mucho el vidrio, que debe absorber las vibraciones y limitar la propagación del ruido. Lo mejor es apostar por vidrios con altos espesores.
Pero, también, en el aislamiento del ruido los perfiles tienen mucho que decir. Un buen sistema de perfiles, bien unidos, será esencial. El sistema de esquinas soldadas que se utiliza en las ventanas con perfiles de PVC son los más resistentes en este aspecto.